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Ruta por las cuevas “El Valle del Corcomé”
- para 2 personas por 19,90 € en vez de 40 €
- para 4 personas por 34,90 € en vez de 80 €
Detalle de la ruta:
La ruta comienza en el desvío de la carretera A-3101 hacia el entorno de la Fuensanta. Desde ahí se comienza a caminar paralelamente a la carretera de la Fuensanta hasta el cruce con el Arroyo del Cañaveral, en el cual el sendero se bifurca de la pista siguiendo al arroyo hasta su desembocadura en el Guadalquivir.
Antes de esto se pasa por el último reducto que queda de la charca de Anguijuela, donde aún se pueden encontrar ranitas meridionales (Hyla meridionalis) y el sapillo pintojo (Discoglossus jeanneae). El camino discurre ahora junto al arroyo, donde se observan grandes manchas de chumberas y pitas que dan una pista de hacia donde
está el sur. Después se accede al bosque de ribera mediterráneo con su típica vegetación: chopos (Populus nigra), álamo blanco (Populus alba), sauces (Salix sp.) y almeces (Celtis australis). Si se hace el recorrido en época de lluvias (otoño y primavera) se pueden observar también la variedad micológica de la zona, donde predominan las tan codiciadas seta de chopo (Agrocybe aegerita) y barbuda (Coprinus comatus).
Una vez desemboca el arroyo en el Guadalquivir, se empieza a vadear el Gran Río a lo largo de 1 km. Pronto aparecerá la primera de las cuevas de la ruta, la Cueva de la Minilla. Este tramo del Guadalquivir esconde una trágica historia, ya que fue por aquí donde se produjo la huida de la XIV Brigada Internacional durante la Batalla de Villa del Río en la Guerra Civil.
Siguiendo por el Corcomé aguas arriba van apareciendo antiguos molinos medievales y fuentes construidas en piedra Molinaza, característica de la comarca. Tras salir del bosque galería, se accede al entorno de la Fuensanta del Valle y su extensa huerta. No cabe duda de que ese lugar está lleno de historias, ya que los restos de antiguas civilizaciones aparecen por todos lados. Pinturas rupestres de origen calcolítico y minas de agua árabes dan a la ruta un atractivo difícil de encontrar.
La ruta termina en el puente que atraviesa el Corcomé y que da acceso a la zona recreativa donde se podrá almorzar disfrutando de los sonidos de este pequeño tesoro del Valle del Guadalquivir.
Una vez finalizada la ruta hay que volver por el mismo camino hasta el lugar de inicio.
Incluye seguro de responsabilidad civil.