Tipos de masajes a elegir:

• Relajante: puede ayudar a lograr un estado de calma y descanso en el cuerpo y a conseguir la máxima relajación muscular

• Drenante: consiste en un masaje muy suave y rítmico realizado con manos y dedos por todo el cuerpo, haciendo la mínima presión sobre la piel. Al finalizar la sesión la piel se queda pálida y relajada. El principal objetivo de este masaje es disminuir el volumen del tejido

• Contra la celulitis: puede ayudar a estimular el flujo de la linfa, mediante técnicas precisas y delicadas

• Reductor: puede ayudar a eliminar la celulitis, la piel de naranja y reducir volumen. Es un masaje enérgico y manual para ayuda a moldear la silueta

• Linfático: es un método de masaje específico destinado a mejorar las funciones esenciales del sistema circulatorio linfático por medio de maniobras precisas, suaves, superficiales y rítmicas. Estas maniobras pueden ayudar a activar y mejorar la circulación linfática por sus trayectos naturales y a favorecer la eliminación de la linfa y líquidos intersticiales (intercelulares)

Potenciales beneficios de los masajes:

• Mejora las defensas: estimula el sistema inmunológico evitando infecciones
• Relaja los músculos: elimina las contracturas musculares
• Desintoxica el cuerpo: mejora la circulación sanguínea
• Evita el envejecimiento: nutre y desintoxica el cuerpo
• Libera emociones
• Alivia el dolor: tonifica y relaja del sistema nervioso
• Aclara la mente
• Mejora la autoestima
• Ayuda en la depresión: equilibra los neurotransmisores y la química cerebral
• Tonifica los músculos: los mantiene nutridos y con buena irrigación sanguínea